Boca a boca o WoM (Word of Mouth).

Pocos conceptos de marketing más antiguos y a la vez, más vigentes, el boca a boca. El ser humano suele confiar en las experiencias de los demás, y si antes se trasmitía la información de unos a otros a través de corrillos, en las plazas de mercados o por las vecinas, ahora las corralas se suceden en Internet.

En este momento el boca a boca tiene el glamuroso nombre en inglés de WoM (Word of Mouth) que significa exactamente lo mismo, pero ya se sabe que, si lo decimos en inglés, parece que suena mucho más profesional. El concepto es idéntico al de toda la vida, pero hoy en día se usan las redes para trasmitir impresiones.

En Marketing Directo nos explican que el WoM es el conjunto de actividades de la empresa que buscan dar al consumidor motivos para hablar de sus productos o servicios, y proporcionarle las herramientas adecuadas para que esas conversaciones se produzcan muchas veces. Este tipo de comunicación puede darse a través del correo electrónico, foros, listas, charlas, IRC o mensajes de texto a un teléfono móvil, y sirve para acelerar el proceso de decisión de compra. También conocido en España como  recomendación personal.

No se ha inventado nada nuevo, solo se ha sofisticado la manera de comunicar. Todos nos leemos las reseñas que se publican sobe marcas o locales. Miramos la puntuación de los productos que nos queremos comprar. Esta es la manera actual de experimentar el boca a boca.

Los propios usuarios los que recomiendan sus productos.

Para las empresas, esta manera de publicitarse es de la mejores, ya que no cuesta dinero y garantiza fiabilidad, son los propios usuarios los que recomiendan sus productos.

Las opiniones generan empatía y hay determinadas páginas que se dedican solamente a ello. Por ejemplo, Trip Advisor es la manera más moderna de explotar el concepto en la red. La gente se lee las reseñas antes de acudir a un negocio y esta plataforma u otras similares pueden encumbrar o arruinar cualquier negocio.