UX/UI dos partes indivisibles. La experiencia de usuario o UX (User Experience) se centra en todas las percepciones que el cliente de una web tiene en su navegación por ella. No se puede separar de la UI (User Interface) que representa todo aquello con lo que los usuarios actúan directamente. La UI es la parte visible de las aplicaciones o webs. Aunque la estética es importante, un buen diseño de UI tiene que ser, sobre todo, funcional.
Ambas funcionalidades están íntimamente relacionadas pues una ayuda a la otra a que las páginas web cumplan su propósito convenientemente.
Con la UI se intenta conseguir que el usuario encuentre muy fácilmente los caminos hacia lo que busca. Y con UX se pretende que esta búsqueda sea lo más satisfactoria posible.
Cuando se planea la interfaz de usuario el diseño es muy importante. Debe primar la sencillez y hacer los botones y comandos lo más intuitivos posible. La UI se encarga de combinar la tipografía con las animaciones, paletas de colores e imágenes para que el entorno le guste al usuario.
Por otro lado, la experiencia de usuario juega un papel clave para cualquier negocio, ya que es la forma en la que los clientes interactúan con la empresa. Una buena experiencia de usuario ayuda a conseguir lo que se busca de manera rápida y sin complicaciones. Para conseguir que esta sea óptima en las comunicaciones digitales, hay que pensar desde el punto de vista del consumidor, diseñar una interfaz intuitiva y probar el producto con usuarios reales.
Elementos de UX/ UI
Son varios los elementos que componen la experiencia de usuario y la interfaz de usuario. La usabilidad es uno de ellos. Esta cualidad se refiere a la facilidad que tiene un consumidor para utilizar un producto. Se trata de que la herramienta sea lo más intuitiva posible.
La accesibilidad es otra de las partes que hay que tener en cuenta. Este factor recoge el diseño responsive y la inclusividad. Se tiene en cuenta desde que dispositivo se accede a la web y si toma en consideración a las personas con algún tipo de discapacidad.
No se puede dejar atrás la funcionalidad: cómo se despeñan técnicamente los productos, los servicios, las aplicaciones móviles, la rapidez de carga… Son factores sumamente importantes para que la experiencia de usuario sea buena. La facilidad en la navegación debe ser tenida muy en cuenta.
La innovación es clave cuando se pretende que la experiencia sea óptima. Hay que dar soluciones a las necesidades de los clientes. Teniendo en cuenta que casi todo el mundo lleva un móvil con acceso a internet en el bolsillo, es importante anticiparse a sus requerimientos.
Y por supuesto, la identidad de marca. Esto, en realidad, es parte de la UI. Los colores corporativos, la tipografía y los elementos gráficos. Son cosas que hay que cuidar para que la interacción sea agradable al usuario.
